Sabemos que en el transcurso de los años la cara pierde volumen. Se produce atrofia de algunos de los paquetes adiposos que son responsables de los contornos y otros se desplazan. Esta evolución se ve perfectamente comparando cualquiera de nuestras fotos desde nuestra infancia hasta ahora. El lipofilling pretende restaurar el contenido original de estos paquetes grasos, especialmente en la zona de los pómulos. Pero también lo podemos usar para mejorar el contorno de la mandíbula o rellenar el área temporal. Por otro lado el tejido adiposo inyectado mejora la calidad de la piel, posiblemente debido a su contenido en células madres (que en condiciones de falta de oxígeno como la que se produce en el tejido que recibe el tejido adiposo se convierten en capilares, arterias y venas).
Primera Consulta
Durante la primera visita realizaremos un examen general de su estado de salud y una exploración facial que nos permita valorar el envejecimiento de su cara, su calidad cutánea y la idoneidad del proceso en su caso o no. El lipofilling es una técnica que nos permite "rellenar" el volumen perdido por el envejecimiento con grasa de la propia paciente. Durante esta primera visita realizaremos una serie de medidas y fotografías que nos permitirán planificar su cirugía.
Se le explicará la técnica quirúrgica y el postoperatorio que deberá llevar.
Es el momento idóneo para que formule todas aquellas dudas que le hayan podido surgir.
Anestesia Y Cirugía
Este tipo de cirugía se realiza habitualmente bajo anestesia local o bajo anestesia local y sedación. El tiempo quirúrgico depende del volumen a rellenar pero suele oscilar entre una y dos horas. Esta intervención NO requiere de ingreso hospitalario.
En un primer paso se inyecta, en la zona donde se va a extraer la grasa, un suero con determinados fármacos y anestésicos que nos van a facilitar realizar una liposucción muy cuidadosa y que a su vez van a disminuir el sangrado. Una vez extraída la grasa ésta debe ser procesada, lo que nos va a permitir obtener la grasa de "mejor calidad" y que incluye las células madre, la cual utilizaremos para su relleno facial.
Tanto la extracción como el relleno de grasa se realiza a través de incisiones míninimas (menos de 0,5cm) que posteriormente serán cerradas con un punto muy fino que se retirará en una semana. Estas incisiones siempre se colocan en pliegues anatómicos, favoreciendo de esta forma su posterior invisibilidad.
El lipofilling facial es una técnica que puede utilizarse sóla, para el relleno facial o asociada a otras técnicas quirúrgicas como puede ser la blefaroplastia o el lifting facial.
Postoperatorio
El postoperatorio en este tipo de intervenciones no es un postoperatorio doloroso y es fácilmente controlable con los analgésicos habituales.
Tras la infiltración la cara se hinchará y habrá unos hematomas, que se resuelven entre 7 y 15 días en función de la persona. Es extremadamente infrecuente que queden irregularidades aunque a veces hay que retocar la zona al cabo de los 4-6 meses si hace falta más volumen o hay que procurar más simetría.
La gran ventaja del tejido adiposo es su ubicuidad, de fácil obtención y que no produce ninguna reacción alérgica o de rechazo.
Tras la intervención deberá utilizar una prenda de presoterapia que se le indicará en consulta durante algunas semanas. El lugar más frecuente de donde se suele obtener la grasa para el lipofilling es el abdomen.
A los pocos días de la intervención la paciente podrá reincorporarse a su vida habitual sin realizar grandes esfuerzos.
El resultado final se valorará a los meses, cuando el proceso inflamatorio haya desaparecido.